Cuando Fuwa se siente solitaria, esta tímida minileyenda se envuelve en la calidez de sus orejas peluditas, pero no os preocupéis, ¡que hay sitio para alguien más!
A la caza perpetua de la guardiana de las estrellas a la que está destinada, Fuwa asume una nueva forma adorable, porque ¿qué guardiana de las estrellas podría resistirse a elegir a esta adorable cerdita?